Dijo Jesús:
Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y
saldrá, y hallará pastos.
Juan 10:9
El evangelio de Jesús, son buenas noticias para nosotros porque nos manifiesta acerca del poder de Dios que salva (Ro. 1:16), del restablecimiento de la relación de Él con el hombre. Este mensaje nos habla de la muerte, sepultura y resurrección de Jesús (1 Corintios 15:1-4) y por ende la salvación para todos los que creen y obedecen.
Este mensaje, es el que Jesús les dice a todos los cristianos que prediquen a toda persona (Mr. 16:15-16), para que todos los hombres sean salvos (2 Pe. 3:9).
Este mensaje fue el que predicó Pedro en Hechos 2:14-47, en el primer día de Pentecostés, en Jerusalén. Allí se convirtieron 3.000 personas ese mismo día.
1- OIR
Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.
Romanos 10:17
Todo el mundo puede oír el evangelio predicado (1Co. 15:1-4) y andar por fe (2 Co. 5:7). La fe viene por el oír la Palabra de Dios. La persona debe oir o leer en la Biblia, Nuevo Testamento, la voluntad de Dios, asimilarla y obedecerla, es decir ponerla en práctica. Es la responsabilidad que le cabe al hombre porque la voluntad de Dios le ha sido predicada, le ha sido manifestada y no tiene excusa.
2- CREER
Por eso os dije que moriréis en vuestros pecados; porque si no creéis que yo soy, en vuestros pecados moriréis.
Juan 8:24
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
Juan 3:16
Dios ama a todos los hombres y desea su bienestar físico y espiritual. Dios provee la salvación para todos los seres humanos. Jesús pago la deuda, con su muerte, que todos los hombres tienen con Dios. Por lo tanto, Jesús con su muerte, sepultura y resurrección, abrió la puerta a Dios, restableció la relación con el Señor, para todos los que lo obedecen.
La salvación es algo que el hombre por sí solo no puede lograr. Ésta es dada por Dios, por gracia. La salvación es condicional: Dios la da y el hombre la acepta. Todo aquel que en Él cree, es todo aquel que le obedece.
3- ARREPENTIRSE
Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente.
Lucas 13:3,5
Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan;
Hechos 17:30
Dios manda que todos los hombres se arrepientan, pero ¿qué significa arrepentirse? Significa un cambio de actitud, dejar de hacer lo malo y comenzar a hacer lo bueno, lo establecido por las Escrituras. Es necesario el arrepentimiento (Hechos 2:38), junto con el bautismo para obtener el perdón de los pecados y la vida eterna (Hch. 11:18)
4- CONFESAR
A cualquiera, pues, que me confiese delante de los hombres, yo también le confesaré delante de mi Padre que está en los cielos.
Mateo 10:32
Felipe dijo: Si crees de todo corazón, bien puedes. Y respondiendo, dijo: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios.
Hechos 8:37
que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.
Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.
Romanos 10:9-10
Dios ha hecho por el hombre, lo que el hombre no podía hacer por sí mismo, eso está manifestado en el evangelio (1 Co. 15:1-4), al enviar a su Hijo a rescatar y salvar lo que se había perdido (Lucas 19:10). El pecador debe creer que Jesucristo es el Hijo de Dios levantado de los muertos para nuestra justificación. El pecador debe confesar delante de los hombres que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios y obedeciendo de corazón (Ro. 6:17-18), se bautiza para perdón de pecados (Ro. 6:3-4).
5- BAUTIZARSE
Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo.
Hechos 2:38
De acuerdo a las enseñanzas del Nuevo Testamento el hombre debe ser bautizado para perdón de los pecados. Luego de oír el evangelio de Jesucristo; creer que Jesús es el Hijo de Dios; arrepentirse, cambiar de vida para hacer la voluntad de Dios y; confesar que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, el pecador se debe bautizar, ser sumergido completamente en agua para perdón de pecados, en el nombre de Jesucristo.
Los que obedecen el evangelio son añadidos a la iglesia:
alabando a Dios, y teniendo favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían de ser salvos.
Hechos 2:47
Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones.
Hechos 2:42
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